En el lugar de siempre

Por supuesto que no me creía, ¿pero cómo demostrarle que era sincera? Crucé los brazos, por su pregunta, tomé aire a la que todos los recuerdos de Will volvían a mi memoria, decirle seguramente lo haría enojarse más... Pero si no lo hacía, se daría cuenta, y no necesitaba usar su poder para notarlo - Sé que no eres un humano - Resumí con eso lo que había visto con algo de seriedad, aún era todo muy confuso, pero por lo que había visto, Will había sido creado, ¿para qué? eso no lo tenía claro, tan sólo tenía claro que era un experimento y que lo habían usado de conejillo de indias para mejorar los demás experimentos... Los recuerdos de Will los había visto tan rápido que apenas había tenido tiempo de asimilarlos, a rasgos generales lo había visto pelear con otros sujetos allí, sin conocer la razón, y lo último que había visto era como sangraba de la herida que tenía en el rostro - Y que los idiotas que te... crearon, te trataron como un mero objeto - Bajé la mirada. Sentí simpatía por Will, lo mismo que había sentido al ver el pasado de Alys, creo que esa era la gran razón por la que sentía tantas ganas de llorar.

Me alcé de golpe, antes de dejar que hablara y tomé de nuevo los guantes, los que me puse con prisa, y volví a donde Will estaba, de hecho me hice justo al frente de él, con la mirada seria. No sé como, pero me atreví a poner ambas manos en sus hombros - No me importa lo que seas, podrías ser un centauro, un hombre lobo, un vampiro, o cualquier otra cosa, yo voy a seguirte viendo como mi loco compañero de trabajo que le encanta hacerle bromas a todos y que siempre sonríe aunque sus ojos nunca brillen - Intenté sonreír, pero no lo hice, creo que no fue así para que me tomara más en serio - Eres mi amigo Will, y nada ni nadie va a cambiar eso - Le aclaré suspirando al final.

Por lo poco que había dicho, podía deducir que simplemente había visto lo esencial. Por suerte no había visto nada de cuando me topé con Ryan, así que me alivié en gran parte. - Me trataban como un mero objeto.. porque lo soy, llevo incluso código de barras... - Solo me faltaba algo parecido a un "Made in China" para terminar de redondearlo todo.

De repente se alzó y se puso los guantes, luego solo volvió en frente para cogerme de los hombros.

- Te creeré cuando lo demuestres con el paso de los días - musité cruzándome de brazos - Si lo consigues, te diré lo que marca una caja enregistradora al pasar esa estúpida luz por mi código - reté con cierto tono de broma, pero seguía estando serio - Eso sí, te pediría que no volvieras a tocarme sin algo en las manos - más que nada para evitar que viera a Ryan, nada más. - Simplemente te lo recomiendo.

- No eres un objeto, creéme sé de objetos, y estos no tienen sentimientos ni cuidan de niños perdidos - Dije después de un momento. Aunque todo eso de la caja registradora me hizo sonreír - Eres un tonto a veces - Suspiré más calmada, de hecho, no tenía ni la mínima duda de que yo seguiría actuando como si nada hubiera pasado... Temía era que Will cambiara conmigo, eso sí, seguro que se aseguraría de mantenerme alejada en caso de que usara mi poder de nuevo.

A su último comentario asentí, y después agregué - Ah, pero no es solo en las manos, si fuera un roce en tu mejilla o un brazo puedo seguir viendo tu pasado - Crucé los brazos - Es la razón por la que generalmente llevo guantes y como ves, si uso falda suelo usar medias largas - Expliqué, pero me aseguraría de no tocarlo ni una gota de ahora en adelante, si quería decir algo de su pasado, esperaría a que él lo dijera porque quería, no porque yo lo había visto. - Por eso no podré tener nunca un novio, ¡imagínate! Con un beso ya podría descubrir todos sus mínimos secretos hasta si me está engañando o que comío hace una semana - Dije con exagerado dramatismo, dejando sus hombros y llevando mis manos al rostro, así exageraba aún más mi expresión. - Es una maldición más que un poder útil - A pesar de tomarlo así, sonreí - Ah~ Pero sí aceptaré el reto - Comenté refiriéndome a lo de la registradora. - Tú sólo confía en mí, no te decepcionaré - Llevé mis manos a la cintura, ya me sentía más animada. A pesar de que no sintiera que todo estaba resuelto, al menos no me odiaba y eso me hacía sentir bien.

- Bueno.. saber si te ha puesto los cuernos o no.. es bueno. creo.. - dejé ir con varias gotas en la cabeza - ¿Y maldición? No creo que sea así, se supone que si alguien te quiere, no le importa si sabes sobre él o no, así que solo espera, tarde o temprano aparecerá alguien tan genial que no tendrás que preocuparte por ello.. aunque dudo que encuentres ese alguien.. nadie puede ser más genial que yo.. - musité más para mi mismo. De repente entrecerré un poco los ojos - oye.. también te recomiendo que no toques a Ryan bajo ningún concepto... no es solo un consejo, si realmente llegas a saber sobre él, no se que podría ocurrir realmente - Yo poco sabía de él excepto lo que había visto, a Ryan no le gustaba hablar de ello, y aunque era muy tentador pedirle que husmeara en su pasado, prefería no hacerlo, pues más o menos ya tenía una idea, y no quería que Violet viera tal cosa. Ni ella ni nadie.

Reí olvidándome por completo de mi "trauma por no tener novio" - Tienes razón, solo tú puedes ser tan genial - Guiñé un ojo divertida, sentándome a un lado de él - Tal vez pueda buscar a alguien genial pero no tan genial como tú - Dije pensativa, realmente dudaba encontrar a "ese" alguien que no le importara que lo supiera todo de él, sabía bien que por más amor que hubiese, habían cosas que eran mejor no recordar. Escuché lo de Ryan con atención y di un pequeño suspiro - A mí no me gusta ir husmeando en el pasado de los demás - Inché mofletes, quejándome por sus advertencias de mantenerme alejada - Pero seré más cuidadosa, si eso te hace sentir mejor - Sonreí mirándolo. - Creo que ahora añadiré una bufanda a mi ropa diaria - Agregué pensativa, solo que cuando hiciera calor, seguro que me desmayaría a la primera.

- No, simplemente te digo lo de Ryan por tu bien, si con el pasado de Lys o el mío ya te has... "traumado", no quiero ni pensar que pasaría con él - musité encogiéndome de hombros - y con eso ya he dicho demasiado, así que simplemente no te le acerques... como si tuvieras alergia a él, ¿entendido? - terminé por pedir - Y no creo que necesites una bufanda... solo tienes que ir con algo de cuidado y ya... - dije alzándome de hombros. - Pero eso deberías de poderlo controlar... eso solo me indica que no controlas demasiado tu poder... - Como cuando yo era pequeño.. que las probabilidades solo se alteraban cuando me enfadaba.

Asentí a sus palabras, ahora me tocaba a mí hablar - No es que me haya... "traumado" - Expliqué - Solo soy muy sentimental, pero ¿qué esperabas? ¿qué lo viera todo y luego lo dejara pasar como si no fuera nada de otro mundo? Willy, lloró por cualquier película que veo y por algún libro o poema, es obvio que ver el pasado de alguien más me pone así también - Encogí los hombros, en esas recordaba que desde pequeña siempre era una llorona sin remedio, lloraba por cualquier tontería o no tan tontería. - A lo mejor si viera el pasado de Ryan querría darle un abrazo, como pensaba hacer contigo, pero quizá volvía a rozarte y prefiero no correr riesgos - Admití asintiendo varias veces, también había pensado abrazar a Alys, pero seguro que me tomaba por loca. Mire a otro lado - No... No sé controlar mi poder, no puedo "apagarlo", no sé porque... Con los objetos si puedo, pero no con las personas - Encogí los hombros reposando mis manos en mi regazo.

- Ah~ qué sensibles son algunos y que tan pocos son otros... - dejé ir desviando la mirada con varias gotas, la primera persona que me había venido a la mente como lado opuesto era Alen, ya que simplemente no mostraba casi emoción alguna. - Y no, te aseguro que lo ultimo que querrías sería hacerle un abrazo, en serio - dije alzando las dos manos como si me estuviera protegiendo - Y deberías de poderlo controlar... pero supongo que si no te propones conseguir eso y no lo trabajas... no lo conseguirás... yo creo que de poder se puede... - y yo siempre podía ayudar en caso que fuera simplemente poco posible.

Suspiré abatida - Sé que soy sensible, mucho, quizá me exceda del "demasiado", pero la verdad es que no me interesa el pasado de los demás, quiero decir... Claro que me interesa conocer a las personas, y siento simpatía por lo que les pudo ocurrir antes, sin embargo, lo único que importa es la persona que son ahora - No sabía explicarlo bien, por lo menos algo que había aprendido gracias a este poder era que lo más importante no era el pasado, sino el ahora - Podría ser un criminal en un pasado, pero lo único que importa es lo que ahora es, no lo que fue - Medio encogí los hombros, me daba cierta curiosidad porque se podía ahora tan sobreprotector por Ryan, claro... Si no quería que me enterara, simplemente evitaría tocar a Ryan y ya estaba. - Por otro lado, supongo que es posible que pueda controlar mi poder, por ahora lo único que tengo que hacer, es ser más cuidadosa, y ya está - junte mis manos, entrelazando los dedos, algo pensativa. - Por otro lado... ¿No me odias? - Pregunté directa, es cierto que estábamos hablando como si nada, y también Will ya había hecho de sus bromas... Pero no quedaría tranquila hasta escuchar de sus labios que no estaba molesto conmigo.

- Mientras no sueltes nada... No, pero a la que sueltes palabra, no dudes que así será.. Puedo cambiar de opinión muy fácilmente~ - advertí cruzándome de brazos - No quiero que me vengan un montón de científicos a preguntarme como carajos me hicieron - añadí bufando cansado - Aunque quizás con la polémica de la tele me ganaría una buena tirada de dinero.... - me dije más para mi mismo, aunque luego recordé lo que me dijo Alec sobre la lotería - sí.. ese sería un mejor camino.. - moví la cabeza de un lado a otros por unos instantes para deshacerme de todo aquello y respiré hondo - bueno, creo que sería mejor dejar entrar a ese par.... creo que su tema de conversación debe de girar en torno al silencio....

- ¿De verdad crees que iría corriendo a decirle a la prensa? No seas tontito - Cerré el puño y le di dos golpecitos, sin nada de fuerza, en la cabeza. Si lo único que tenía que hacer era guardar el secreto, sería "pan comido". - Puedes creer que de mi boca no saldrá absolutamente nada - Le sonreí y después reí imaginandome a Alec y Alys en absoluto silencio en la cocina, imaginé que no sería un silencio incómodo, a ambos parecía gustarles estar así. - Sí, mejor que vengan de nuevo, de tanto silencio por ahí se les olvida hablar - Exageré. Me alcé del sofá y sin esperar si Will se levantaría fui a la cocina a abrir la puerta, en efecto los dos estaban callados, cada cual en su propio mundo. Reí por ello - Que silenciosos son - Crucé los brazos mirandolos.

- Y por tu buen humor, imagino que ya resolvieron todo - Más que una pregunta, era una afirmación, y yo asentí.

- Sí, por eso vine a buscarlos, la sala es más cómoda que la cocina - Volví a asentir sonriente.

No me alcé a la que Vi se fue a buscarlos, más que nada porque me notaba cansado. Realmente alterarme no me iba nada bien... A la que volvieron solo los miré curiosos, la cosa era tal que Alec y Lys parecían dos niños castigados a los que la profesora los había ido a buscar.... añadiendo sus caras aburridas.... Al final, Alec y Vi se sentaron donde antes, y Lys otra vez a mi lado, sin decir nada.

- Por lo menos saluda~ - dije acercándome a ella - ¿un beso en la mejilla~? - pregunté acercando mi rostro de lado, aunque ella solo puso su manos entera, soltando un "no" seco.

Reí por la reacción de Alys, a simple vista si parecían una pareja de verdad... Una muy curiosa pareja debía agregar. Mire a Alec, y después recosté mi cabeza sobre su hombro.

- Deberíamos fingir que somos pareja, ¿qué dices? - Sugerí a modo broma, él no me quito pero pude sentir su mirada de desaprobación.

- Digo que no - Dijo simplemente. Me preguntaba que clase de pasado tenía él, al parecer todos los que rodeaban a Will, incluyéndolo a él, tenían mucho que ocultar... Realmente si supieran mi pasado veían que solo soy una aburrida chica que tiene que estudiar.

- Está bien, está bien, no tienes que ponerte tan serio - Molesté sin quitarme donde estaba. Estaba algo agotada, demasiadas cosas por un día, quien diría que hace unas horas pensaba que no pasaría nada interesante en la noche...

- Sois personas de respuestas negativas~ - dejé ir suspirando - aunque el día en que os vea alegres, saltando y diciendo sí a todo será el fin del mundo. - dije riendo mientras pasaba un brazo por detrás de Lys por el respaldo del sofá. - ¿Os habeis divertido en la cocina?

- Mucho - ironizó Alys sin siquiera moverse un poco - te he dejado los cristales empañados por el vapor del agua que he tomado - añadí sin inmutarme demasiado.

- Oh, curioso~

- Tampoco es para exagerar - Añadió Alec por el comentario de Will, yo reí, si que sería el fin del mundo, o significaba que se habían enamorado de verdad... Quien sabe, muchas personas cambiaban por eso o por un gran vuelco en sus vidas.

- Yo quería ver a Alys empañar los cristales... - Comenté con cierta decepción, alcé un poco la mirada para ver a Alys y Will, qué pasaría si alguno de los dos se enamorara de otra persona, ¿qué harían con su falso romance?. - Debió ser muy divertido - Añadí aún pensativa.

- Solo se volvieron los cristales opacos... nada más - musitó Alys alzando una ceja.

- Eres todo un caso~ - dejé ir divertido por la situación - Como Al~ - dije en un susurro al aire.

- Deja ya de compararme con ese crío, ¿quieres? No quiero pensar que tengo un doble en este mundo.. - musitó algo molesta.

- Es que es tu doble~ pero en chico y con 16 años menos... - respondí riendo.

Abrí la boca para decir algo, pero no se me ocurrió algo coherente que decir sobre el asunto, por lo que me limité a reír. - Es curioso que justo ahora se hayan encontrado, ¿cosas del destino? - Agregué después.

- Yo creo que sí~ - dejé ir besando levemente a Lys en la sien.

- Yo no creo en esas cosas - musitó poniendo un solo dedo en mi mentón, creo que eso era una clara amenaza, por lo que me aparté riendo levemente por aquello.

- Toma eso como.. "pura casualidad" - dije aun riendo.

Violet rió, aún estando recostada en Alec, él tan solo prestaba atención a la conversación sin decir mucho al respecto, todavía estaba pensando en el poder de la rubia y lo que había visto sobre Will, y también sobre Alys, a lo mejor ella había comprobado que en efecto Alys era la madre de Alen.

- No tienes que creer en el destino para que este se cumpla, y si lo piensas bien, las "casualidades" no son tanto así, sino más bien es algo inevitable, es algo que debe suceder... No sé explicarlo realmente - Dijo sonriendo con tranquilidad. Ella creía que sin importar si se creía en el destino, en las casualidades o en el karma, las cosas sucedían por una razón. Y no era el momento, pero el encuentro de Alys y Alen debía suceder por el simple hecho de que su relación los unía más de lo que ella pudiera pensar. Escuchó la lluvia chocar contra las ventanas, ya no caían truenos pero la lluvia no se detenía - ¿Y si contamos historias de terror? - Sugirió sin pensar, tan solo era por poner tema.

- ¿historias de terror? por mi bien - dije no demasiado seguro, no es que me dieran miedo esas historias.. pero odiaba las que te daban sustos.. prefería las que solo... te contaban algo que daba miedo.

- ningún problema - creo que Lys había pasado por tanto que ya no le daban miedo ese tipo de cosas.

Alzó la vista para ver a Alec - Supongo que está bien - Violet sonrió y por fin se levantó de encima de Alec, sacando una goma de pelo para hacerse una cola alta.

- Perfecto - Sonrió de lado, algo sombría. Se aclaró la garganta y miro a cada uno de quienes lo acompañaban, y al empezar hablar, su voz sonaba diferente, con seriedad, aunque su sonrisa no se desvaneció de ella - Esto es justo lo que nunca debes hacer - Comenzó a hablar, con un tono siniestro - ponerte frente al espejo y repetir nueve veces seguidas el nombre de Verónica. - Apoyó sus manos en el sofá, a cada lado de ella - No serías el primero que se ríe al conocer esta historia, que lleva circulando por el mundo desde hace varias décadas. Muchos antes que tú han pensado que se trataba de un cuento chino y se han burlado, pero otras personas aseguran que quienes no han hecho caso de la advertencia y han aceptado el desafío, han cargado con una maldición terrible.

La lluvia siguió chocando contra la ventana, a pesar de que había bajado la intensidad, las gotas chocaban con fuerza contra la ventana - ¿Quien es Verónica? O mejor dicho: ¿quien era? Se trataba de una chica de 14 años que, estando en el pueblo con sus amigos, hizo espiritismo en una casa abandonada. Todo el mundo sabe que es algo tremendamente peligroso y que jamás debe tomarse como un juego. Ella no siguio las reglas de los fantasmas, se burló durante toda la invocación y una silla que habia en la habitacion cobró vida y la golpeó mortalmente en la cabeza. - Miro hacia las sillas del comedor, y después volvió la vista a sus acompañantes - Sin embargo, Verónica aun no descansa en paz. Su espíritu está condenado y vaga buscando venganza entre aquellos que no saben respetar el Mas Allá, como le sucedía a ella en la vida real.

Se quitó las botas para poder subir los pies en el sofá, más bien, se arrodilló en el sofá, así tenía una mejor perspectiva de Alec, Will y Alys; el primero la veía, en cierta manera sin poder despegar la mirada de ella - Ana era una chica de la edad de Verónica que conoció la leyenda en su instituto. Sus amigos la picaron, diciedole que no se atrevía a decir `Verónica` nueve veces ante el espejo. A ella le daba miedo, pero venció su terror porque le avergonzaba quedar mal ante todo el mundo. Una compañera fue a los servicios de esa planta del instituto para comprobar, entre risas, si cumplía la prueba. - Tomó aire y después lo dejó ir - Ella lo hizo, no pasó nada y el grupo lo olvido enseguida. Menos Ana. Para ella, la autentica pesadilla comenzó esa misma noche. Estaba en la cama, cuando un sonido la despertó. No se trataba de un estrépito, sino de una especie de susurro indescifrable que oia cerca de la nuca, mientras sentia como si alguien respirara en su cuello. Aterrada, se levantó y encendió la luz. Allí solo estaba ella. A pesar de eso, no pudo dormir en toda la noche.

Curiosamente la lluvia comenzó a ser mucho más intensa, afuera, los rayos y truenos volvían a escucharse, por lo que ella tuvo que elevar la voz, de manera que la lluvia no la opacara - Al día siguiente, no se atrevió a contárselo a nadie. Estaba muerta de miedo, y en medio de la clase tuvo que salir al servicio para mojarse la cara y despejarse. Pero cuando entró al baño, hacía mucho frío y una capa de vaho cubría el espejo. Ana lo limpio con la mano para comprobar horrorizada que tras ella había una chica que no habia visto jamas, con una expresion de espanto y sangre en la cabeza. Fue solo un instante. Cuando se volvio a mirar, ya no había nadie. Ana rió nerviosamente, pensando que todo era fruto de su imaginación, los nervios y el cansancio. Sin embargo, cuando se volvio hacia el espejo vio algo que la dejo helada. Al borrarse el vaho una frase había permanecido escrita: `Soy Veronica. No debiste invitarme a volver`. - De un saltó volvió a acomodarse bien en la silla - Ana no pudo soportarlo. Hoy pasa sus dias encerrada en un manicomio, y solo habla para jurar y perjurar que el fantasma de Verónica la sigue atormentando.

Terminó el relato, miro a Alec, a Lys y luego a Will en ese orden. Violet sacó de su bolsillo un pequeño espejo - Me pregunto si... Todavía está por ahí su espíritu - Miro el espejo - Verónica, Verónica, Verónica, Verónica, Verónica, Verónica, Verónica, Verónica, Veró... - Un fuerte trueno cayó cerca y a consecuencia el bombillo que los iluminaba estalló dejandolos en la oscuridad, Violet soltó el espejo que causó un pequeño estruendo y después se abrazó a Alec ahogando un grito. - Eso no estaba en los planes... - Musitó con miedo en la voz.

Will y yo escuchamos toda la historia sin decir o hacer nada, simplemente callados escuchando a la chica rubia hablar. No es que me asustaran realmente las historias de terror... pero tampoco me gustaban demasiado, aunque ya había escuchado muchas... eran un buen pasatiempo en un reformatorio. No tronaba, pero la lluvia seguía cayendo con fuerza, lo que le daba un toque más terrorífico a aquella historia que ya había escuchado por algún lugar.

Por unos instantes observé a Will, al parecer él no la había escuchado nunca, o eso mostraba su rostro. Cuando la chica rubia estaba por decir por novena vez el nombre de esa tal Verónica un trueno de esos que parecen explosiones al edificio de al lado estalló. Realmente pegué un bote, pues para nada lo esperaba y menos en un momento como ese... Me llevé una mano al corazón, esa típica reacción de cuando alguien se asusta. Se habían ido las luces... - menudo trueno.. - dejé ir aun notando como mis latidos volvían a la normalidad. Estaba todo oscuro, y solo entraba la luz de la calle que, al ser de noche, era poca.

De repente oí a alguien quejarse, era Will. - ¿Will? - dejé ir la pregunta extendiendo los brazos hasta toparme con él - ¿Estás bien? - pregunté extrañada, pues no dejaba de quejarse, al parecer algo le dolía.

En unos segundos más volvió la luz, y fue entonces cuando vimos que efectivamente no estaba bien. Tenía sus manos en la zona de su corazón y estaba tirado hacia delante, como si fuera a vomitar, aunque lo único que salía de su boca eran hilos de sangre que aumentaban a la que tosía. Le puse una mano en la frente, quizás tenía alguna enfermedad y tenía fiebre, pero no parecía tener... su temperatura era normal... quizás anormal si teníamos en cuanta que todas las veces que había llegado a tocarlo, estaba helado.

De no ser porque Violet había abrazado a Alec justo al momento del trueno, él habría dado un pequeño saltó por el trueno, suspiró más tranquilo cuando el trueno pasó, aunque siguieran en la penumbra. - Justo tenía que caer en ése instante - Murmuró intentando acostumbrarse a la oscuridad. Tanto Violet como Alec miraron a donde debía estar Will en cuanto Alys lo llamó, sin embargo era dificil ver lo que ocurría, por lo que se quedaron tal donde estaban.

Un momento después, la luz regresó, Violet se soltó de Alec - ¡Will! - Dijo con preocupación en su voz, intentó levantarse, pero Alec fue más rápido y caminó hasta Will, lo inspeccionó de arriba a abajo y no le fue necesario imitar la acción de Alys para adivinar que su temperatura seguía tan baja como de costumbre.

- Deberíamos llamar...

- No, una ambulancia no - Interrumpió la rubia leyendo las intenciones de Alec - Se tardarán mucho en llegar - Añadió levantándose también de donde estaba, en lugar de ir a donde Will adelantó el paso hacia la cocina.

En la cocina tomó una toalla que encontró extendida y la remojó rápidamente, para volver a la sala. Se arrodilló frente a Will y mojó un poco su rostro - Relájate Will, no pasó nada, fue sólo un trueno - Intentó decir con calma, después miró a Alec y él asintió entendiendo lo que le quería decir, con ambas manos lo sostuvo por los hombros, así hizo que Will dejara de inclinarse para mantenerlo recto. Violet intentó pensar en que podrían hacer, pero los nervios le estaban ganando.

- William necesitas respirar - Pronunció Alec notando que la tos se hacía más profunda, y por lo tanto los hilos de sangre no dejaban de salir de él. Si no respiraba su corazón se detendría. - Toma aire, Will - Repitió, a este paso estaba considerando en llamar ayuda.

Me extrañé por la negación de la chica rubia... ¿Cómo que no llamar a una ambulancia? Se supone que ellos sabrían qué hacer... Pero Will seguía quejándose, y tal y como Alec le decía, intentaba respirar, pero con la tos se le hacía difícil e incluso alguna vez se atragantaba con su propia sangre. Por mi parte, no tenía ni la más remota idea de qué hacer, o más bien mi idea era la misma que Alec... llamar a una ambulancia... así que seguía sin entender porque la chica se negaba. Will seguía cogiéndose fuerte la zona de su corazón y cada vez se quejaba más.

La condición de Will empeoraba con el paso de los segundos - Intenta respirar profundo y después tose dos veces, luego vuelve a respirar y vuelve a toser - Intentó indicar a Will, si lograba hacerlo su corazón tendría que volver a estabilizarse, sin embargo la idea de llevarlo a un hospital seguía siendo la idea primordial. - Insisto, lo mejor es llamar a una ambulancia

Violet negó rotundamente con la cabeza - Puede parecer una buena idea, pero se tardarán - Insistió, entonces miro a Will pensando en una idea para tranquilizarlo - Piensa en Alen, Jody y Ryan, se asustarán si te ven así - Pronunció pensativa. Alec suspiró, y miro con cierta reprobación a Violet, no llamar a una ambulancia era algo estúpido de hacer en una situación así. - Vamos Will, tranquilizate - Volvió a decirle.